Las ventajas de disponer de productos congelados en tu bar o restaurante
Aunque la gastronomía española es considerada una de las mejores de todo el mundo, son muchos los establecimientos de hostelería que por su volumen de trabajo no disponen del tiempo necesario para conseguir todos los ingredientes frescos. Por ello, es conveniente que conozcas las ventajas de los productos congelados para agilizar las recetas que vas a preparar en tu cocina.
8 ventajas de disponer de productos congelados en hostelería
Los productos congelados, tanto semipreparados como elaborados en su totalidad, se emplean cada vez más en bares y restaurantes. Al contrario de lo que pueda parecer, no son de menor calidad que los frescos, ya que la tecnología en la industria alimentaria ha evolucionado mucho en los últimos años.
Si estás pensando en añadir productos congelados en la cocina de tu bar o restaurante, lee las ventajas que pueden aportar a tu despensa.
Mayor tiempo de conservación
Una de las principales ventajas que encontrarás en los productos congelados es que su tiempo de conservación es mucho mayor que el de los alimentos frescos.
- Los productos se envasan en recipientes plásticos donde se hace uso de atmósferas protectoras, como la atmósfera modificada o el envasado al vacío, entre otras.
Combate problemas de estacionalidad
Uno de los principales problemas que presentan los alimentos frescos, como las verduras y las hortalizas, es que solo puedes servirlos en determinados momentos del año. En cambio, los productos congelados están disponibles los 365 días del año.
- Esto es algo muy importante, ya que de este modo los bares y restaurantes no tienen que estar pendientes de cuáles son las frutas, hortalizas o verduras de temporada.
Son una ayuda a la hora de hacer frente a los picos de demanda
Tu bar o restaurante puede tener picos de demanda imprevisibles y variables en el tiempo. Esta es una de las principales razones por las que adquirir productos congelados es tan buena idea. De este modo, tu establecimiento puede atender las peticiones de los clientes y ofrecerles productos de muy buena calidad.
Conservan todos los nutrientes
Cuando los alimentos frescos se congelan de forma adecuada, el proceso de congelación no afecta lo más mínimo a sus propiedades nutricionales. En el caso concreto de las verduras, al congelarse mantienen intactas sus vitaminas, algo que no sucede cuando se compran verduras frescas y pasan varios días hasta su preparación.
- Los productos congelados se presentan como la mejor opción si quieres servir platos con textura, sabor y un gran valor nutricional en cualquier época del año.
Ahorras dinero y evitas el desperdicio de comida
Los productos congelados para bares y restaurantes suponen un importante ahorro de dinero a largo plazo porque aguantan mucho más tiempo en perfecto estado. En cambio, en el caso de alimentos frescos como verduras u hortalizas, debes consumirlos en un periodo de tiempo muy corto una vez que los has adquirido. De lo contrario, tienes que tirarlos a la basura, lo que conlleva pérdidas económicas para tu negocio.
Siempre puedes garantizar la higiene
Todos los productos congelados se someten a un exhaustivo control de seguridad e higiene para garantizar la adecuada conservación de todos sus nutrientes y propiedades. Por ello, son los menos implicados en casos de intoxicaciones alimentarias porque el frío reduce en gran medida la proliferación de patógenos.
Puedes ofrecer más productos
Hay que sumar que los congelados ofrecen a los establecimientos hosteleros la posibilidad de ofrecer una mayor variedad de productos. En lo que a gustos se refiere no hay nada escrito, de forma que los restaurantes necesitan ofrecer una carta muy amplia para atraer más clientes y con perfiles variados.
Vas a ahorrar tiempo
Por último, los productos que están congelados, especialmente los elaborados como los postres y los semielaborados, también conllevan un importante ahorro de tiempo, algo que es esencial en bares y restaurantes con un ritmo agitado en la cocina.
Debes tomar en consideración las ventajas de los productos congelados si tienes un bar o restaurante. Aguantan más tiempo en perfecto estado, conservan todas sus propiedades y nutrientes, y se pueden servir durante todo el año.