¿Por qué hay que cambiar la carta de un restaurante y cada cuánto hacerlo?
La mayoría de los empresarios que tienen un local de restauración se preguntan: ¿cada cuánto debo cambiar la carta del restaurante? Realizar una rotación de la carta tiene múltiples beneficios para el negocio, ya que puede resultar atractivo de cara a la clientela al tener siempre novedades que probar. Por otro lado, para el personal del establecimiento puede suponer una manera de seguir aprendiendo cada día más con nuevos platos y propuestas gastronómicas. Llegados a este punto, ¿sabes cómo y por qué debes hacerlo?
Cambiar la carta de tu restaurante: ¿por qué debes hacerlo?
Cambiar la carta de manera periódica puede ayudarte y causar una excelente impresión en tu clientela. Sin embargo, hay algunos más aspectos positivos que debes conocer y te mostramos a continuación.
Captar la atención de nuevos clientes y fidelizar a los fijos
En este caso, porque con una carta renovada podremos jugar continuamente con nuevos platos que consigan atraer a clientes que se sientan atraídos por propuestas culinarias diferentes. Además, los que ya te visitan valorarán la sorpresa de ir al establecimiento y encontrarse cada vez con nuevos platos.
Estar presente ante la competencia
Puede que los demás negocios de tu alrededor no se estén adaptando, o que también realicen cambios. Por este motivo, lo más destacado es estar en evolución siempre y adelantarse a las novedades gastronómicas que van surgiendo, o a ideas nuevas que se te puedan ocurrir como propietario del local.
Renovación que marque la clara identidad de tu negocio
Es posible realizar un cambio de carta pensando en que algo así puede definir la marca de tu restaurante. Así, puedes apostar por productos propios o de kilómetro cero, por ejemplo, pero también cambiar platos en función de la temporada.
Cómo cambiar la carta de un restaurante
Ahora que te has decidido a cambiar la carta, debes saber el siguiente paso: cómo cambiarla. En el mundo en el que vivimos actualmente, los cambios son muy drásticos y rápidos, de ahí la importancia de saber cómo cambiar la carta y tener en cuenta una serie de consejos siempre.
El primero de ellos sería un cambio que cumpla la normativa de alérgenos en los restaurantes. En este sentido, para evitar intoxicaciones y problemas con clientes, podemos incorporar mayor información sobre los ingredientes que utilizas o el riesgo de que se produzcan alergias. Por supuesto, sin perder la esencia de ofrecer cada vez las nuevas tendencias o ideas del equipo.
De hecho, es una buena forma de actualizar los costes del negocio y adaptarlos a las nuevas circunstancias que se puedan crear. Es decir, si un determinado producto ha subido de precio y encarece el menú o la carta, igual es momento de ser atrevido y desarrollar otros platos o de repercutir el incremento del alimento al cliente en mayor o menor medida.
Asimismo, siempre hay que pensar en abrazar a un público cada vez más diverso e internacional. Por este motivo, es la oportunidad ideal para cambiar de idioma, apostar por los códigos QR e incluso por cambiar el diseño, los nombres de algunas creaciones o de abrir la puerta a otros cambios más profundos en lo que respecta al interior del restaurante (decoración, mobiliario, etc.).
No obstante, más centrados en la carta, se pueden incluir fotografías, incrementar la oferta de la carta de bebidas (suelen dar más margen de ganancias) o potenciar almuerzos, desayunos o meriendas.
¿Cada cuánto tiempo cambiar la carta o el menú?
Lo más recomendado es efectuar un cambio una vez al año. De esta forma, podrás repercutir a los clientes la subida de los precios o, por otro lado, ver qué es lo que funciona y lo que no. No obstante, puedes tener una carta que se renueve dos veces al año, en Navidad y en el mes de junio, si crees que ofrecer dos cambios (por tu ubicación o clientela) puede ser más provechoso.
Aunque puedes hacerlo cuando tú desees, lo ideal es hacerlo cuando llega el verano, momento en el que más personas tienen tiempo libre, salen a disfrutar de la hostelería y, además, dependiendo de la zona, el turismo extranjero y nacional es más elevado.
Asimismo, debes tener en cuenta la disponibilidad de determinados productos (si son de temporada o ideales para una estación del año u otra) y, por supuesto, pensar en si tienes algunos productos que están próximos a caducar. Esto es, no tendría lógica realizar el cambio en una semana determinada si todavía tenemos género sin consumir y que se va a echar a perder. Las cuentas no te saldrían.
Como ya has visto, cambiar la carta del restaurante tiene más efectos positivos que negativos. Puede suponer una oportunidad para el negocio, ya que estaremos siendo innovadores y llamando la atención de los comensales. Por eso, haz los cambios que sean necesarios, siguiendo nuestros consejos.